Inspirado en las enseñanzas de Meister Eckhart
“Dios está siempre dispuesto.
Nosotros no lo estamos.
Dios está en casa.
Nosotros estamos en el exilio.”
— Meister Eckhart
¿Y si la unión con lo divino no dependiera de cuánto haces, cuánto sabes o cuánto sientes…
sino de cuánto espacio permites en tu interior?
Para Meister Eckhart, el camino no se trata de alcanzar algo, sino de permitir que algo más profundo sea.
El alma no debe subir ni conquistar.
Solo dejar de llenarse de lo que no es esencial.
Eckhart decía que Dios sólo puede nacer en un alma vacía.
No vacía de humanidad, sino vacía de apropiación.
Vacía de exigencias, de querer ser alguien, de apego a las formas.
“Mientras el alma esté llena de cosas creadas, Dios no puede obrar en ella.”
— Meister Eckhart
No es una práctica de negación.
Es una rendición natural —no pasiva, sino consciente y presente.
Una forma de decir:
“Estoy aquí. No sé. No necesito saber. Solo quiero estar presente a lo que es.”
Para Eckhart, el desapego no es una renuncia amarga.
Es una forma sutil de libertad silenciosa, donde el alma deja de aferrarse al resultado, al significado, a la identidad.
“El hombre desapegado nada quiere para sí, y por eso puede recibirlo todo.”
— Parafraseando a Eckhart
La verdadera apertura surge cuando ya no se necesita nada a cambio.
No con esfuerzo.
No con técnica.
Solo con escucha, con disponibilidad interior, con pausa real.
“La oración más elevada no es hablar, sino estar en silencio y dejar a Dios ser Dios en ti.”
— Meister Eckhart
Siéntate sin buscar experiencia alguna.
Siente la respiración, sin manipularla.
Permite que todo lo que eres esté presente.
No intentes vaciarte. Solo reconoce el espacio que ya está ahí.
Quédate ahí.
Eso que no tiene forma, ni nombre, ni meta... es lo más verdadero en ti.
Llega cuando dejas de querer poseerlo.
No es un evento.
Es un nacimiento silencioso, en lo más hondo del alma que se abre sin pedir.
Es el lugar donde lo eterno toca lo humano.
No buscamos subir.
Buscamos soltar suavemente lo que no somos,
para permitir que lo más verdadero simplemente nazca.
—
📿 La verdad no viene al que se esfuerza.
Viene al que permanece disponible,
como una tierra fértil esperando la lluvia.
— Desarrollo del Ser